Cuando hablamos de burbuja inmobiliaria en Finlandia debemos distinguir entre dos zonas: el área metropolitana de Helsinki y el resto del país. Ello es debido a que es justamente en la capital donde se está dando un aumento de la inmigración en busca de trabajo, lo que está haciendo que debido a la escasez de suelo se dé un aumento en el precio de la vivienda, sobre todo de la vivienda usada. De hecho, aproximadamente un 10% de la población de esta ciudad tiene como idioma materno uno distinto al finés o el sueco (ambos oficiales en Finlandia). Aquí vamos a hablar del conjunto del país.
Pero, ¿se puede hablar del inicio de una burbuja inmobiliaria como sucedió en España? Para tratar de responder a esta pregunta debemos tener presente algunas similitudes entre las dos situaciones, pero también otras tantas diferencias.
Entre las primeras podemos hablar del bajo tipo de interés que impera tanto en la actualidad como a principios de este siglo en el seno de la Unión Europea. Dicho abaratamiento del dinero hace que la gente quiera endeudarse más y, entre otras cosas, comprar una vivienda. Pero como resulta que el mercado inmobiliario a corto plazo no puede responder con un aumento de la oferta, la solución estriba en subir los precios, que es justo lo que sucedió en España y lo que está sucediendo en Finlandia.
Y es este abaratamiento del precio del dinero lo que hizo que en España en el año 2006 el nivel de endeudamiento medio de la familia se situara en el 114,3%, llegando al 143% durante 2008. Actualmente dicho nivel está en el 119% en Finlandia. Evidentemente este es un dato preocupante que las autoridades finlandesas deberán tener en cuenta para evitar la tan temida burbuja inmobiliaria.
Respecto a las diferencias que podemos encontrar entre ambos países, se podrían resumir en:
– En España acudían no sólo los inmigrantes en busca de trabajo, como ocurre en Finlandia, sino también los turistas en busca de vacaciones, buen clima y descanso. Y es ese uno de los motivos por los que aumentó la especulación inmobiliaria, e hizo que subieran tanto los precios.
– Entre los años 2000 y 2007, punto álgido de la burbuja inmobiliaria, el precio de la vivienda aumentó en España, más o menos, un 133%. Una vez que la misma ha estallado, entre esa fecha y el primer cuatrimestre del 2013 ha bajado, aproximadamente, un 37%. En Finlandia, entre los años 2005 y el primer cuatrimestre del 2013, ha aumentado un 37,65%.
– Tampoco nos podemos olvidar de los créditos hipotecarios. En este sentido, en España hubo un aumento del 30,32% de créditos hipotecarios entre 2003 y 2007, produciéndose a continuación un descenso del 64,18% en los mismos hasta 2012. En Finlandia, desde 2005 hasta 2012 hubo un aumento sólo del 3,01%.
Una cosa está clara, y es que los esfuerzos del BCE (Banco Central Europeo) para ayudar a los países más perjudicados por esta crisis, como puede ser una bajada de los tipos de interés cercana al 0%, está, de alguna manera, perjudicando a los países con una economía más fuerte.
Teniendo en cuenta estos datos, sobre todo las diferencias en cuanto al aumento del precio de la vivienda y concesión del crédito, yo me decantaría por un ajuste entre oferta y demanda más que hablar del inicio de una burbuja inmobiliaria en el mercado finlandés, si bien las autoridades están estudiando medidas al respecto para que no se llegue a dar ésta.
Y vosotros, ¿qué opináis al respecto?