Día a día vemos como las noticias no mejoran y esto hace que comencemos a preocuparnos seriamente sobre nuestro futuro, y nuestra jubilación. Cada vez se habla más de la no sostenibilidad del sistema de pensiones en España, un sistema de reparto, en el que los actuales cotizantes son los encargados de pagarle las pensiones a los actuales pensionistas. ¿Y qué ocurre si cuando me jubile no hay suficiente gente cotizando? Esperemos que esa situación no se dé, pues se nos pondrían las cosas un poco complicadas.
Para poder dormir más tranquilo por las noches, no hace falta recurrir a los somníferos, sino que también existen herramientas complementarias de previsión de la jubilación que nos ayuden a completar nuestra pensión llegado el día que nos jubilemos.
Llegado el final de cada año, a muchas personas le entran la prisa por realizar aportaciones a planes de pensiones, y de esta manera intentar aligerar nuestra factura fiscal; pues aquellas aportaciones a los planes de pensiones, dentro de los límites establecidos, nos reducirán nuestra base de rendimiento del trabajo, lo que nos ayudará a ahorrar en impuestos hoy, para posteriormente en el momento de la jubilación tributar por esa recuperación de lo depositado en el plan de pensiones, se produce un diferimiento fiscal (con la incertidumbre del cómo será la fiscalidad en el día que nos jubilemos). Para que esta prisa de final de año, no nos lleven a escoger un plan cualquiera, o dejarnos seducir por un regalo, será mejor que ya ahora a mediados de año comencemos a pensar en ello.
¿Qué debemos fijarnos a la hora de escoger un plan de pensiones?
Pues fundamentalmente en qué tipología de activos financieros invierte el mismo. Si somos una persona muy poco aficionada a asumir riesgos no debemos contratar un plan de pensiones que invierta el patrimonio del fondo en su mayor parte en renta variable, pues podemos llevarnos la sorpresa de que al jubilarnos tenemos menos dinero que el que hemos aportado. Para saber en qué tipos de activos invierte nuestro fondo asociado al plan de pensiones, debemos pedirle la ficha del fondo a la gestora o entidad financiera con la que tenemos pensado contratarlo, si esta no lo facilita, personalmente creo no debería aportarse a ese plan de pensiones.
Otra cuestión que también debemos tener en cuenta es la rentabilidad que ha ido proporcionando el fondo a lo largo de su existencia, debe quedar muy claro que los beneficios del pasado, no garantizan en absoluto futuras ganancias, pero siempre puede servirnos de indicativo para conocer el buen saber hacer del equipo gestor del fondo. Estos datos, podemos consultarlos generalmente en la información que proporcionan las gestoras y entidades que los comercializan, pero también podemos hacerlo en la Dirección General de Seguros, organismo supervisor de este tipo de instrumentos, aunque esta publicación de la rentabilidad no está demasiado actualizada. Otra herramienta de la que nos podemos servir para ver la evolución que ha tenido el plan de pensiones en el que estamos interesado es Morningstar, página web en la que se publica información sobre fondos de inversión y de pensiones.
Los planes de pensiones, no se caracterizan por ser altamente rentables, según las estadísticas publicadas por Inverco, ninguna tipología de los mismos supera una rentabilidad media del 5%, en un horizonte temporal de cinco años, ni un 2% si reducimos el horizonte temporal a tres años.
Mi recomendación personal es que cuanto más alejados estemos a la edad legal de jubilación, la elección puede hacerse en planes con mayor riesgo, pues siempre tendremos años por delante para recuperar lo perdido, en caso de que la evolución no sea buena. Cuanto más próximos a la edad de jubilación la tendencia debería ser a aportar o traspasar a planes de pensiones con un mayor contenido en activos de bajo riesgo, como deuda de países con una alta calificación crediticia.
Una opción para los más aversos al riesgo, son los planes de pensiones garantizados, en los que se nos garantiza una rentabilidad en una serie de años. Ejemplo de ello es el BBVA Plan Tranquilidad 22C, el cual se trata de un plan garantizado de Renta Fija a 8 años, que garantiza el 100% de lo aportado más un 3,25% TAE. El único inconveniente de estos fondos es que la garantía será valida desde una fecha, hasta otra, por lo que aportaciones posteriores, no estarían sujetas a esa garantía, desde mi punto de vista esto no es un problema, pues podemos ir en años sucesivos aportando a otros planes de pensiones, o traspasando de unos a otros en función de nuestros intereses pues el traspaso entre fondos de pensiones es totalmente gratuito. Lo ideal sería crear una cartera con varios fondos de pensiones, que ayuden a cubrir nuestras necesidades, no es necesario, ni recomendable casarse con uno.
¿Confias en el sistema público de pensiones?¿Por el contrario crees que es necesaria una prestación adicional?, esperamos tus comentarios