Llega el final de un año en el que todas las previsiones apuntan que podría ser el principio del fin de la crisis. La banca tras el desplome de innumerables empresas está viendo como sus opciones de negocio se reducen por lo tanto, ¿ha llegado el momento de abrir el grifo?.
Están apareciendo en el mercado bancario algunas opciones de financiación interesantes, si estás interesado en hacer una pequeña reforma en tu casa o comprar un nuevo coche, estoy seguro de que te interesará seguir leyendo.
Préstamo BMN: la entidad financiera resultante de la unión de Caja Granada, Caja Murcia y Sanostra, ha lanzado un innovador producto de financiación al mercado; se trata de un préstamo al 0% de interés, pero no es oro todo lo que reluce, pues la financiación no nos saldrá gratis.
En el caso de solicitar un préstamo por un importe de hasta 6.000 euros, en periodos de 12, 24 ó 36 meses, el tipo de interés es del 0% para el caso de contratarse por un plazo de 12 meses (con gastos de apertura del 2,90%).
En el caso de solicitar el préstamo por un plazo de 24 meses, las condiciones son del 4% de interés y para el plazo de 36 meses del 6% de interés, en ambos casos con un 2,90% de gastos de apertura.
Como podéis observar, la comisión de apertura es elevada, sin embargo los tipos de interés son muy competitivos, sobre todo si deseamos la financiación a tan solo 1 año. De todas formas, a plazos tan cortos, es probable que consigamos financiación gratuita en el establecimiento en el que compremos nuestro electrodoméstico, coche, etc.
En la nota de prensa no informa de más detalles acerca de la vinculación exigida con la entidad, ni si existe o no una comisión de por cancelación anticipada.
Préstamo Auto Santander: el gigante rojo, ofrece un préstamo desde 6.000 hasta un tope de 90.000 euros a pagar en un máximo de 8 años. La comisión de apertura es del 1,5%. Y en el caso de que la vinculación con la entidad sea máxima, la TAE se reduciría a un 7,057%. Los requisitos son los siguientes:
– Domiciliar nómina o Seguros Sociales (-2 %) – Domiciliar 3 recibos habituales trimestralmente (-0,50 %) – Realizar 3 usos trimestrales con tarjetas de débito y/o crédito Santander (-0,50 %)
En caso de no cumplir la vinculación, el interés aplicado será del 10,310 % TAE (9,25 % TIN)
La TAE resultante no es excesivamente alta, y las condiciones de vinculación son aceptables.
Préstamo Pre-concedido BBVA: Si eres cliente de BBVA seguramente ya hayas recibido este tipo de ofertas por parte de la entidad, desde la banca online, se puede acceder a un préstamo pre-concedido de un máximo de 17.000 euros a pagar en un máximo de 8 años. La TAE de este préstamo varía en función de la vinculación, pues en el caso de tener la nómina domiciliada la cuota se vería reducida en un 1,50%. En el caso de no obtener la bonificación la TAE sería del 14,65%.
Como podéis observar en el caso del BBVA la TAE duplica a la de préstamos de entidades de la competencia, por lo tanto se antoja algo caro. De todas formas, la ventaja de este préstamo es que podemos disponer de él prácticamente al momento, pues la entidad ya nos ha otorgado el riesgo, nosotros tan solo tenemos que aceptar las condiciones en la banca virtual.
Por último, uno de los préstamos más interesantes que he visto es el de ING Direct, se trata de un préstamo muy claro y sencillo. El préstamo se concede con un mínimo de 6.000 euros, hasta un máximo de 40.000 euros a devolver en 5 años. La TAE es del 7,76% en el caso de ser cliente con nómina domiciliada, subiendo al 8,84% en el caso de tener la nómina en otra entidad. La gran ventaja que le observo a este préstamo es la ausencia de comisiones de apertura o amortización anticipada, esto desde mi punto de vista es muy positivo, por lo que podemos ir amortizando nuestro préstamo anticipadamente, en función de nuestras posibilidades, sin suponer un coste adicional.
En mi opinión, compensa pagar un tipo más alto de interés, siempre y cuando podamos amortizar anticipadamente sin cargo adicional. Esto puede favorecernos en diferentes aspectos:
– Acabar antes de pagar el préstamo. – Reducir la cuota mensual. – Amortizar el préstamo porque hemos conseguido financiación más barata por otra vía.
Si os endeudáis hacerlo con cabeza