El escándalo está servido. Si hace unos días la noticia de portada de los principales diarios, y también del mundo de la economía eran las operaciones de lavado de dinero que se estaban llevando a cabo en el BPA de Andorra, la de hoy es la congelación de todas las cuentas y productos bancarios de la filial en España, así como la declaración de quiebra con un concurso de acreedores de Banco Madrid.
Actualmente, todos los que tengan dinero en dicha entidad, tendrán que someterse al dictado de un juez. Hasta entonces, no van a poder recuperarlo, y puede que tampoco nunca lleguen a poder hacerlo. Hay que recordar que en este caso, hay operaciones de narcotráfico y de lavado de dinero, por lo que los clientes que estuviesen relacionados con estos casos verán cómo sus activos son decomisados si no son capaces de demostrar su origen lícito. Para los demás clientes, aquellos que se hayan visto afectados por la quiebra y su dinero fuese legal, hay que recordar que ya se ha emitido un comunicado en el que se podrá recurrir al Fondo de Garantía de Depósitos, organismo que garantiza todos aquellos que sean inferiores a los 100.000 euros por titular.
Según los datos que se han filtrado, el Banco Madrid tenía una cartera con unos 15.000 clientes con depósitos. De ellos, la gran mayoría no sufrirán pérdidas por el concurso de acreedores, ya que tan solo 500 cuentan con cantidades que superan la cifra que está garantizada por el organismo. Eso sí, sobre los plazos, aún habrá que esperar a que las investigaciones se pongan en marcha y será un juez el que determine todo el proceso. De momento, todos los comunicados oficiales llaman a la calma, pero el nerviosismo parece más que evidente.
Por otro lado, Andorra no ha congelado las cuentas, ni tampoco se ha declarado el concurso de acreedores, pero por seguridad, se ha decretado una especie de corralito que impide a los que tengan cuentas en el BPA retirar más de 2500 euros al día.
Imagen: Mic