Importante decisión que se ha tomado con respecto a los servicios de gestión de carteras de inversión, que dejan de estar exentos del IVA y ahora tendrán que soportar un gravamen del 21%. Esta es la decisión que ha tomado la Dirección General de Tributos, comunicándoselo a la Asociación Española de Banca y a la Confederación Española de Cajas de Ahorro.
Ésto se produce después de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea fallara en el 2012 a favor de la imposición del impuesto. El tribunal considera que éste tipo de operaciones están sujetas y no exentas de IVA en todo el territorio de la Unión Europea. Según esta sentencia por lo tanto, la administración española tiene la obligación de hacer cumplir el fallo de dicho tribunal.
Según el titular del Ministerio de Hacienda; Cristóbal Montoro, la aplicación del IVA a las gestoras de servicios de gestión discrecional de carteras de inversión ”no perjudica a las gestoras, en contra de lo señalado en algunos medios, ya que al convertir el servicio en sujeto y no exento, permite una mayor deducción de las cuotas del IVA soportado que hasta ahora no era posible”. Es decir, que realmente los afectados por el impuesto serán los propios inversores.
Está medida afectará en mayor medida a grandes patrimonios que son los que realmente utilizan los servicios de estas sociedades de gestión discrecional de carteras de inversión. La mayor proporción de ahorradores utilizan los servicios directamente a través de entidades financieras para realizar sus operaciones de inversión. Estas gestoras mueven patrimonios por valor de 9.000 millones de euros al año, percibiendo comisiones del 1%.
Se estima que gracias a esta medida se podrá recaudar para las arcas del Estado en torno a unos 18 millones de euros. Vemos que al final no es sólo el consumidor de a pie el que tiene que soportar el IVA del 21%, sino que se extiende a este tipo de sociedades que suelen acumular grandes beneficios.
