Hoy cambiamos nuestros relojes. La madrugada de este domingo, o lo que es lo mismo, a las 2, nuestros relojes marcarán las 3. Se trata del conocido como el cambio de hora del verano, aunque para que éste llegue todavía faltan algunos meses. ¿Sabes de dónde viene la tradición y por qué cambiamos la hora?
En realidad, la tradición del cambio de hora de verano, y la vuelta a la hora normal durante el invierno no tiene una historia tan larga como podríamos llegar a pensar. De hecho, dependiendo de tu edad es probable que no recuerdes que eso se ha hecho toda la vida. Hemos instaurado lo de adelantar nuestros relojes en 1974, y por la razón de la crisis petrolera que se vivió en aquel entonces. La razón fundamental para llevar a cabo esta nueva norma era la de ahorrar energía, intentando mitigar el efecto de la crisis del combustible a nivel mundial.
Una historia de relojes europea
El cambio de hora actualmente está regulado por el Instituto de Diversificación para el Ahorro Energético, pero desde el año 2000 es la Directiva Comunitaria la que rige estos cambios de hora apostando por el hecho de que todos los países de la Unión Europea dispongamos de los mismos cambios y no se produzcan días o semanas de diferencia complicando todas las relaciones entre naciones.
Sin embargo, el fin último del cambio de hora al horario del verano es ahorrar energía. Así qué ¿cuánto ahorramos con ese cambio de hora?. En realidad los cálculos a nivel europeo aseguran que podríamos llegar a un 5% del total, lo que implica unos 300 millones de euros en España. Sin embargo, ese ahorro es diferente según las regiones, ya que algunas como Cataluña por su situación oriental se benefician más de otras como Galicia, que según expertos debería adoptar el horario canario o portugués.