Ya sabemos que sobre el mundo del empleo, todos se creen con derecho a opinar. Aunque esas opiniones no se hayan solicitado, tengan poco que ver con lo que de verdad necesitamos para salir de la situación en la que nos encontramos, o siquiera estén directamente relacionadas con la ocupación que se les supone al organismo del que provienen, ahí están. Y por lo polémicas que resultan, acaban convirtiéndose en noticia del día. Y ése es precisamente uno de los casos de hoy. ¿Recordáis aquellas declaraciones en las que desde el Círculo de Empresarios se decía que era mejor contratar a una mujer de menos de 25 o más de 40 por el hecho de que no se quedaría embarazada? Pues ahora vienen con más.
En este caso concreto han llegado a suponer que lo mejor para el sistema público de empleo, sería precisamente que se pensase en un modelo como el actual privado, donde los despidos fuesen el principal cambio con el que debería contar el sistema. Es decir, que los funcionarios no tuviesen la plaza asegurada como actualmente es, después de pasar unas oposiciones que cada vez se han vuelto menos interesantes por las pocas plazas que se convocan y por la caída de los salarios con los recortes en lo público.
Yo imagino que todo este empeño con acabar con lo que de momento funciona y no genera demasiadas protestas, y olvidar lo que sí de verdad nos preocupa, que es el paro en general, viene motivado por el hecho de que con este nuevo sistema se asegurarían una mejor productividad. Pero desde luego, nadie se ha parado a pensar en otros métodos mucho menos drásticos y a ponerlos en práctica. Ni tampoco a que quizás, el nuevo modelo, podría hacer inviable que alguien se gastase unos cuantos años de su vida en aprobar unas oposiciones. Pero bueno…. por proponer, aunque sea sin pensar mucho, que no sea.
Imagen: Treball Generalitat