La burbuja inmobiliaria que vivimos es sin duda una de las más dañinas de la historia de España y ha sido la causa de que muchas familias hayan tenido que pasar verdaderas desgracias. Algunas enfrascadas en préstamos que por el desempleo no han podido pagar, y otras, que aún ante la falta de liquidez y con varios inmuebles en su poder, no podían vender por los bajos precios del mercado. Pero en el mercado no dejaban de caer los números. Las cifras demostraban que todavía quedaban números rojos por venir, aunque parece que la tendencia al cambio ya se ha producido.
De hecho, en muchas ciudades españolas ya se registran alzas en el precio de los inmuebles que se venden. Los bancos con sus inmobiliarias habían contribuido notablemente a bajar el precio final de los pisos y viviendas, pero en la actualidad, no parece que vayan a hacerlo mucho más. Más bien todo lo contrario, y es por eso que para muchos promotores éste es ya el momento de invertir. Puede que más adelante nos cueste bastante más.
Evidentemente, los precios de la vivienda en España con la burbuja inmobiliaria estaban inflados. Pero se desinflaron también a la velocidad de la luz. De hecho, cayeron estrepitosamente causando los problemas que mencionamos antes, y otros nuevos. Pero estas cuestiones tienen ciclos, y para muchos, sobre todo por lo que ha subido el valor inmobiliario en las islas, y en algunas localidades en España, así como fuera de las grandes capitales, es el momento de comprar si se tiene la intención de conseguir el mejor precio. A partir de ahora, no habrá grandes bajadas, y poco a poco los precios repuntarán. No como para volver a la situación anterior a la burbuja, pero sí como para no llevarnos la rebaja que aún conservan muchos de esos inmuebles.
Imagen: Udo Springfeld