Como todos los años, al terminar el año, nos hartamos de ver agresivas ofertas de captación de planes de pensiones, todo tiene su lógica en el sentido de que en estos últimos meses del año ya podemos hacer las cuentas de aproximadamente cuanto nos tocará pagar a hacienda, y quizá una aportación a un plan de pensiones, puede ayudarnos a reducir nuestra factura con el fisco.
Este año, esta campaña se torna todavía más especial, puesto que a partir de 2015, se limitarán las aportaciones a 8.000 euros para todos los partícipes. Actualmente la legislación, permitía reducirse una aportación de la menor de las siguientes cuantías:
– El 30 por 100 de la suma de los rendimientos netos del trabajo y de actividades económicas percibidos individualmente en el ejercicio. Para contribuyentes mayores de 50 años, el porcentaje será del 50 por 100.
– 10.000 euros anuales. Para contribuyentes mayores de 50 años, la cuantía anterior será 12.500 euros.
Ante esta situación, las entidades financieras se lanzan de forma canibal al ahorrador, intentando buscar traspasos o aportaciones a los fondos de pensiones que a ellos les interesa. Para ello generalmente utilizan la estrategia del regalo, tanto en metálico como en especie. Algunos ejemplos de ello son:
– Banco Popular, ofrece una bonificación de hasta el 8% de lo traspasado, abonado como aportación al plan, tras una permanencia de 8 años, siempre que se realice a los planes: Horizonte 75, Crecimiento 100, España, USA y Gestión Total. Hasta que pasen 8 años, no veremos el fruto de ese regalo al que hemos optado. – Caixabank incentiva los traspasos con el pago del 3% en efectivo para aportaciones o traspasos a partir de 6.000 euros a una relación de planes de pensiones escogidos por la entidad. La bonificación se realizará en efectivo en marzo de 2015, pero nos exigirá una permanencia hasta 2021. – Santander, sin embargo opta por la estrategia del regalo en especie, por ejemplo para aportaciones o traspasos de entre 4.000 y 8.9999 euros podemos acceder a un set de cuchillos y sartenes o una maleta; para aportaciones de entre 9.000 y 24.999 euros conseguiremos una tablet o un centro de planchado; y para aportaciones superiores a los 45.000 euros un portátil táctil o una televisión de 48”. En su página web no informa de si existe un periodo de permanencia.
La reflexión que debemos hacer, primero es:
– ¿Un plan de pensiones es el mejor producto para cubrirme en la jubilación? Para ello debemos hacer nuestras cuentas fiscales, y si nos interesa fiscalmente realizar aportaciones, podemos utilizar este vehículo para ahorrar para la jubilación, en caso de que las aportaciones no nos generen ningún tipo de ahorro fiscal presente, debemos contemplar otro tipo de alternativas a los planes de pensiones, como los PIAS y valorar que producto se adecua mejor a nuestras necesidades.
En el caso de que fiscalmente nos convenga hacer aportaciones a los planes de pensiones, debemos valorar qué tipo de plan nos interesa es muy importante saber escoger en función de nuestro horizonte de jubilación el plan de pensiones más adecuado, la norma básica es que si nos quedan más de 15 años para la jubilación nuestro plan contenga mayor porcentaje de renta variable, y el porcentaje de esta se reduzca al acercarnos a nuestra edad de jubilación.
Una vez, tengamos clara la tipología de plan que nos conviene, debemos leer bien la letra pequeña, por ejemplo hay planes garantizados que exigen una permanencia, y nos aplican fuertes comisiones si no la cumplimos, etc.
Por último algunas cuestiones que no debemos olvidar son:
– Nuestro plan de pensiones podemos traspasarlo a otro plan, si ningún tipo de repercusión fiscal. Eso sí, debemos ser conscientes de los compromisos adquiridos con el banco, si queremos traspasar el plan antes de cierto periodo de permanencia, puede que nos apliquen comisiones.
– Debemos conocer aquellas situaciones en las cuales podemos rescatar anticipadamente el plan de pensiones.
Valora bien tus aportaciones a los planes de pensiones, y piensa que es probable que los regalos que te ofrecen los acabes pagando con creces.
